Goodbye Barcelona
llega directo desde Londres a la ciudad que le da nombre. Este apasionado musical sobre los brigadistas
internacionales inspirado en historias reales nació en un pequeño teatro de
Londres y tras una financiación mediante crowdfunding han conseguido traerlo a
Barcelona.
Cuenta la historia
de Sammy, un joven inglés que movido por sus ideales decide dejar su hogar e ir
a España durante la Guerra Civil a luchar por La República. En su viaje conoce
a otros brigadistas, se enfrenta a los horrores de la guerra e incluso
encuentra el amor.
Es un drama bélico con sus momentos divertidos y
su dosis de amor, como todo musical que se precie. Así, tiene todos los
ingredientes y la fuerza que debe tener un gran musical de éxito, incluyendo
buenas canciones y un gran cast, pero a la vez tiene un espíritu íntimo y
humilde.
Destacan los vozarrones de todo el elenco. Pau
Quero (Sam), Carme Mateu (Rebecca), Josep Papell
(Jack), Joan Vazquez (George), Carol Rovira (Pilar), Antonio
Del Valle (Esteve) y Manuela
Nieto (La República) lo bordan. Los momentos en que canta La República son
totalmente show-stopping (Manuela Nieto tiene una voz que quita el hipo), el
personaje de Jack (una especie de “Courfeyrac”) te robará el corazón y la
historia de amor entre los dos jóvenes te enternecerá a más no poder. Por
cierto, nuestro ojito derecho Joan Vázquez está fantástico, como siempre, y se
nota que disfruta como un enano.
En definitiva, es
un emotivo homenaje a los
brigadistas que vinieron de todo el mundo a España y arriesgaron sus vidas
luchando con el bando de la República de una manera desinteresada, únicamente
por sus ideales y porque creyeron que era lo correcto. Te hará llorar si eres un poco sensible y te encantará si eres un justiciero nato y te gustan los musicales
del estilo de “Los Miserables”.
¿Lo mejor? Lo bien documentado que está y el elenco.
¿Lo no tan bueno? El Teatre del Raval, ya que, aunque es un
teatro con mucho encanto, no tiene las mejores condiciones para un musical y en
ocasiones se oye más a los músicos (que de todas formas hay que decir que son
geniales) que las voces y cuesta entender la letra de las canciones.
Paola Marín